jueves, 7 de octubre de 2010

Mi otro regreso

Además de mi regreso por el interés, en estos últimos tres meses me han ocurrido muchas cosas, y hay una que ha sido especialmente importante: mi otro regreso tras ocho meses…


Por fin, después de demasiado dolor (sobre todo al principio) y sufrimiento (sobre todo mi estancia en el hospital), pude volver a trabajar, cosa que pensé, a veces, no iba a llegar nunca.
Estaba deseando volver a sentirme útil, sobre todo arreglando lo que mis compañeros estropean. Además, tenía mucha ilusión de realizar mi nueva función en la oficina, ya que había cambiado de rol, y esto me aportaba mayor tranquilidad en el día a día, aunque en contrapartida también menos sueldo en el mes a mes, aunque según mi criterio, prefiero la tranquilidad antes que el dinero.
Lo mejor fue el primer día de trabajo, era como llegar a un sitio nuevo, en el que aún no tienes claro las cosas que hacer ni el cómo se hacen, pero con la ventaja de conocer a los compañeros.
Con dificultad creerás que todas estas ganas e ilusión eran ciertas si además cuento que lo primero que hice ese día fue rellenar el parte de vacaciones para tomarme un par de semanas desde el día siguiente, pero es que las vacaciones son vacaciones, y también tenía muchas ganas e ilusión de disfrutarlas, quizás un poco más.

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